Los agentes de la ley de Estados Unidos conocían al tirador de Florida antes del ataque

El reciente baño de sangre es casi idéntico a casos de entrampamiento[1] del FBI en 2015

Un tiroteo horrible se ha producido en Florida causando la muerte de al menos 52 personas con decenas de heridos. El British Independent informa en el artículo “Omar Mateen: el atacante del club gay de Orlando identificado por la policia“, que

La policía ha identificado al hombre armado en el tiroteo en un club gay en Florida como Omar Mateen de 29 años de edad, un ciudadano estadounidense cuyos padres proceden de Afganistán.

Las autoridades de Orlando dijeron que estaban investigando el tiroteo como un acto de terrorismo, ya que el número de muertos se eleva a 50, con más de 53 heridos.

A primera vista, parece ser otra tragedia sin sentido perpetrada por un «terrorista», inspirada por grupos militantes contra los que EEUU afirma haber estado luchando durante casi dos décadas. Sin embargo, el Independent informa de otro hecho más abajo en el cuerpo de su artículo, afirmando que:

ABC News informó que había estado en el «radar» de la policía, aunque no está sujeto a ninguna investigación.

Si esto suena como una narrativa familiar es porque prácticamente todos los «ataques terroristas» de alto perfil realizados en Norteamérica y Europa en los últimos años se han cometido por sospechosos que han estado durante mucho tiempo bajo investigación por parte de Estados Unidos, Canadá, los organismos europeos encargados de hacer cumplir la ley y las agencias de inteligencia.

El artículo de la CNN, ”50 muertos en la discoteca de Florida, el tirador promete lealtad a ISIS“, daría más detalles sobre los antecedentes de Mateen, indicando:

Dos funcionarios dijeron a la CNN que el FBI había investigado a Mateen en algún momento por la posibilidad de tener vínculos o simpatizar con el extremismo islámico. Un oficial de la policía dijo que había dos casos abiertos que involucran a Mateen, pero las investigaciones no dieron lugar a pruebas suficientes para acusarle de nada.

En las últimas dos semanas, Mateen adquirió legalmente una pistola Glock, que se encontró en el lugar del tiroteo, en una tienda de armas del Condado de St. Lucie, dijo un oficial de la ley.

Lo que la CNN no puede mencionar es la larga historia que tiene el FBI de atraer «simpatizantes» a través de una serie de pasos para adquirir «suficientes pruebas», incluyendo haciéndose pasar por terroristas y suministrando a sospechosos armas y planes de ataques precisamente como el que se acaba de producir en Florida.

Para entender las implicaciones de otro ataque terrorista de alto perfil que involucra a un sospechoso conocido por las fuerzas de seguridad, hay que examinar ejemplos anteriores de ataques declaradamente preparados que fueron «frustrados» en el último momento por el FBI, así como ataques llevados a cabo por individuos seguidos durante años e incluso detenidos varias veces por las policías occidentales y agencias de inteligencia sólo para soltarlos una y otra vez hasta que finalmente la arman «gorda».

Inspirado por ISIS? O inspirado por el FBI? El FBI ha preparado múltiples ataques en 2015 casi exactamente iguales que el ataque de Florida

Un sospechoso de terrorismo armado hasta los dientes asaltando un lugar público y matando a decenas de personas es en realidad un guión muy familiar. El FBI escribió varios guiones como este sólo en 2015, incluyendo entrampar y detener a un sospechoso enfermo mental después de que le proporcionara un arsenal de armas mortales casi idénticas al arsenal empleado recientemente en Florida.

The Intercept informaría en su artículo: ”Otra detención “terrorista”; otro enfermo mental armado por el FBI”, que:

Agentes de la ley de EEUU han anunciado otra detención terrorista el lunes, después de armar a un enfermo mental y entonces acusarle de tener armas de fuego.

ABC News citó a un «alto funcionario federal que informó sobre la detención», como diciendo: «Esta es una muy mala persona detenida antes de que pudiera hacer cosas muy malas».

Sin embargo, en un montaje que recuerda tantos otros llevados a cabo por el FBI desde el 11 de septiembre, Alexander Ciccolo, de 23 años, «también conocido como Ali Al Amriki», era al parecer un enfermo mental que no estaba haciendo nada más que voceando sobre la yihad violenta y hablando (realmente en formas alarmantes) sobre el lanzamiento de ataques, hasta que se encontró con un informante del FBI. En este momento, comenzó a hacer listas de compra de armas.

The Intercept también haría referencia a la declaración jurada del FBI (.pdf), que indica (el subrayado es nuestro):

De acuerdo con la declaración jurada, Ciccolo habló por primera vez con el informante del FBI sobre atacar dos bares y una estación de policía. Más tarde, habló de atacar un campus universitario con una bomba casera hecha con una olla a presión como la usada en el ataque terrorista de la maratón de Boston; también habló sobre el uso de armas de fuego y una gran cantidad de munición. Ciccolo, de acuerdo con la declaración jurada, entonces «dispuso de las armas de fuego de una fuente humana confidencial («CHS») trabajando con el FBI.»

La lista de armas proporcionada al sospechoso enfermo mental por el informante del FBI es impactante. Revelada en la declaración jurada del FBI (.pdf), las armas incluyen una 9mm Glock 17, una 10mm Glock 20, un rifle .223 Colt AR-15 (mencionado por los medios como un «fusil de asalto»), y un rifle 556 Sig Arms SG550 (también llamado a menudo como un fusil de asalto). También se incluye en la declaración jurada la misma retórica histérica alentada por los informantes del FBI, ahora evidente en las recientes acciones del presunto terrorista Omar Mateen en Florida.

El FBI literalmente suministró un arsenal de armas mortales a un hombre enfermo mental al que ayudaron a planear un ataque terrorista, arrestándolo justo antes de cometer el crimen. El único factor que impidió que el entrampamiento de Ciccolo de 2015 se convirtiera en un ataque directo al estilo del tiroteo de Florida fue el hecho de que el FBI detuvo a Ciccolo antes de que llevara a cabo su ataque planeado – mientras que en el siguiente, Mateen no fue arrestado.

El papel del FBI en la obtención de armas de Mateen nunca será conocido ya que Mateen ahora está –convenientemente­– muerto. Incluso si las compró «legalmente» en una tienda de armas, hay que señalar que, en otros casos de entrapamiento del FBI, se alentó a los sospechosos para que compraran las armas ellos mismos, con el FBI arrestándolos nada más salir de las tiendas de armas con su arsenal recientemente adquirido.

La WLWT5, una filial en Cincinatti de la NBC, informó en un artículo de 2015, «FBI: el hombre de Cincinatti que compró fusiles había planeado atacar el Capitolio de  EUA“, que (el subrayado es nuestro):

Los agentes dijeron que el martes y el miércoles Cornell se reunió con el informante al final para planificar su viaje a DC para ejecutar su plan. Compró dos rifles semiautomáticos Armalite M-15 de 5.56 mm el miércoles por la mañana, junto con 600 cartuchos de munición, y fue arrestado.

Cornell compró los fusiles en la tienda de armas Point Blank, en la avenida Harrison del municipio de Colerain. Pasó una comprobación de antecedentes y pagó 1.900 $ en efectivo, 700 $ por cada rifle y alrededor de 400 $ por la munición.

El dueño de la tienda de armas, John Dean, dijo que los agentes del FBI le notificaron que Cornell tenía que venir a comprar las armas de fuego unos 10 minutos antes de que entrara en la tienda.

Dean dijo que los agentes le dijeron que permitiera la compra y que los agentes arrestarían a Cornell después de que saliera de la tienda.           

¿Qué hubiera pasado si los agentes no lo hubieran detenido cuando salió de la tienda? Tenía dos rifles semiautomáticos y 800 cartuchos de munición, más que suficiente para llevar a cabo un ataque al estilo del tiroteo de Florida. Algunos pueden estar inmediatamente tentados de llegar a la conclusión de que el FBI nunca permitiría que se perpetrara un ataque «real». Sin embargo, estarían equivocados.

Un importante ataque organizado por el FBI que se acabó produciendo

El paper que va tenir l’FBI en l’atac mortal probablement va amagar que un informador de l’FBI no va gravar les seves converses amb agents de l’FBI després de créixer la desconfiança durant l’operació de descoberta.

El FBI, de hecho, estaba dirigiendo a los terroristas que llevaron a cabo el atentado con bomba del World Trade Center en 1993. El papel que tuvo el FBI en el ataque mortal probablemente escondió que un informador del FBI no grabó sus conversaciones con agentes del FBI tras crecer las sospechas durante la operación de descubierta. The New York Times en su artículo ”Las cintas reflejan la propuesta para frustrar la bomba utilizada en la explosión del World Trade Center”, informó:

Los agentes de la ley dijeron que los terroristas estaban fabricando una bomba que finalmente se utilizó para hacer volar el World Trade Center y planearon frustrar a los conspiradores sustituyendo en secreto los explosivos por polvo inofensiva, dijo un informador después de la explosión.

El informador debía ayudar a los conspiradores a construir la bomba y suministrar el polvo falsificada, pero el plan fue cancelado por un supervisor del FBI que tenía otras ideas sobre cómo el informador, Emad A. Salem, había de ser utilizado, dijo el informador.

El informe, en el que se da la transcripción de cientos de horas de grabaciones en cinta que el Sr. Salem en secreto hizo de sus conversaciones con agentes de la ley, retrata las autoridades en una posición mucho mejor de la que se pensaba para frustrar el atentado del 26 de febrero a las torres más altas de la ciudad de Nueva York. La explosión causó la muerte de seis personas, más de mil heridos y daños por más de quinientos millones de dólares. 

El FBI y otras fuerzas de seguridad de Estados Unidos, Canadá, Europa y agencias de inteligencia «accidentalmente» no han detenido a sospechosos de terrorismo que hacía tiempo que conocían e incluso habían sido detenidos varias veces, lo que se ha convertido en endémico. En los últimos años, prácticamente todos los sospechosos o bien eran conocidos por estos organismos o estaban involucrados en una historia de crimen y terrorismo antes de llevar a cabo sus actos finales de gran terrorismo.

Así fue en los diversos ataques franceses. Muchos de la organización que llevó a cabo los ataques franceses, después estuvieron directamente involucrados en los ataques de Bélgica. Para explicar el hecho de que prácticamente todos los sospechosos habían estado al alcance de las agencias de seguridad europeas desde hacía años pero todavía eran capaces de llevar a cabo sus ataques mortales, los medios de comunicación occidentales han intentado atribuirlo a la falta de recursos.

En realidad, lo que se está llevando a cabo es una estrategia de ingeniería de la tensión utilizando tanto la amenaza de terrorismo como el terrorismo real para crear histeria, miedo, división y en última instancia, obediencia y claudicación de las poblaciones occidentales.

Hay que recordar que la misma Al Qaeda comenzó como una empresa conjunta entre Estados Unidos y Arabia Saudí para luchar en una guerra a través de terceros contra la Unión Soviética en Afganistán, donde las fuerzas occidentales convencionales no podían ir. También hay que señalar que, desde entonces, Al Qaeda y sus afiliados más recientes, el autoproclamado «Estado islámico», han contado con el apoyo logístico de EEUU y la OTAN desde hace años en guerras indirectas que van desde Libia a Siria, Irak y las fronteras de Irán, el sur de Rusia y el oeste de China.

Más recientemente, ha sido admitido incluso por la prensa occidental que el «Estado islámico» está recibiendo suministros y armas desde el mismo territorio de la OTAN, tal como admite el UK Telegraph en su artículo  ”Las fuerzas de oposición sirias con el apoyo de Estados Unidos rodean al ISIL en la ciudad clave y cortan la ruta de suministro principal“:

… Las fuerzas de oposición sirias han rodeado completamente la plaza fuerte de Manbiy, controlada por Estado Islámico, y han cortado la ruta principal de la organización del resto del mundo…

La pérdida de Manbiy será una gran pérdida para la organización. Había sido un punto de referencia en una línea de suministro de ISIL entre la frontera de Turquía y la capital de facto del grupo extremista, Raqqa.

Una vez más vemos que mientras los Estados Unidos dicen que combaten «Estado islámico», su socio de la OTAN, Turquía, es literalmente la fuente de la capacidad de lucha de la organización terrorista, con las fuerzas estadounidenses estacionadas permanentemente en Turquía desde hace décadas y habiendo convertido este país en un miembro de la OTAN desde la década de 1950. A pesar de los reconocimientos abiertos que el «Estado islámico» está operando desde Turquía, EEUU ha utilizado la presencia de la organización terrorista dentro de Siria como pretexto para intervenir en la guerra directamente.

Si EEUU estuviera verdaderamente interesado ​​en detener al «Estado islámico», sus aliados en Ankara podrían ejercer fácilmente la máxima fuerza en el territorio de Turquía para cortar al grupo antes incluso de que llegara a territorio sirio. Que tanto Washington y Ankara están fingiendo una inexplicable incapacidad para hacer esto, e insisten en cambio que la guerra debe ser combatida dentro de Siria expone la naturaleza cínica con la que Occidente utiliza –no combate– el terrorismo para promover sus agendas políticas nacionales y geopolíticas.

Ya que intereses especiales intentan aprovechar este último ataque terrorista, hay que tener en cuenta todos estos hechos recientes para entender una realidad de la que los políticos occidentales y los medios de comunicación intentarán alejarnos los próximos días y semanas.


[1] Nota del traductor: En derecho penal, el entrampamiento es una práctica que consiste en que un agente de la policía induce a una persona a cometer un delito que de otro modo habría sido poco probable que cometiera.