Imagen: El territorio controlado por ISIS se ve de color gris oscuro formando un corredor directo hasta la frontera siro-turca -o más exactamente, empezando en la frontera turco-siria. En los últimos días, este corredor ha estado a punto de ser completamente cortado por los avances conjuntos siro-rusos en los alrededores de Alepo y hacia la orilla occidental del río Éufrates. Al este del Éufrates ya está en manos de los kurdos y las fuerzas sirias. La OTAN está proporcionando claramente apoyo primario a ISIS, y sin embargo ISIS es acusado de estar detrás de un ataque a un miembro de la OTAN.

Como se predijo y se informó anteriormente, los terroristas que han participado en un ataque sin precedentes en el centro de París, matando a más de cien personas y dejando a cientos de heridas, eran bien conocidos por los organismos de seguridad franceses antes de que el ataque tuviera lugar.

El UK Daily Mail ha informado en su artículo, “Caza de los asesinos de ISIS: Un terrorista identificado como un ‘joven francés conocido por las autoridades’ – dos más encontrados con pasaportes sirios y egipcios”, que:

Uno de los terroristas implicados en los ataques de anoche en París ha sido identificado oficialmente como un parisino, según informaron los medios locales.

El hombre, que fue asesinado en el Bataclan, se identificó utilizando sus huellas dactilares y era del barrio parisino de Courcouronnes, en el sur.

Informes franceses dicen que el hombre, que tenía alrededor de 30 años, ya era conocido por las autoridades antiterroristas francesas antes de los ataques de la noche anterior (el subrayado es nuestro).

Del mismo modo, en enero del 2015, después del «ataque a Charlie Hebo», que dejó 12 muertos, se reveló que las agencias de seguridad francesas habían hecho un seguimiento de los autores durante casi una década antes, habían detenido al menos a uno de los terroristas un total de dos veces y lo habían encarcelado al menos una vez, seguido a dos de ellos en el extranjero donde se habían entrenado con organizaciones terroristas conocidas y posiblemente habían luchado junto a ellas en Siria, antes del seguimiento de vuelta a territorio francés. Sorprendentemente, los organismos de seguridad franceses no hicieron nada con los terroristas, afirmando que después de una década de seguimiento habían decidido finalmente cerrar el caso precisamente por la cantidad de tiempo necesario para que pudieran planificar y ejecutar su gran final. Más guerras y más vigilancia no pueden ayudar.

Con un escenario similar emergiendo ahora, sobre todo después del «ataque a Charlie Hebo», donde las agencias de seguridad francesas tenían conocimiento de los extremistas pero no han llegar a detenerlos antes de que llevaran a cabo otro ataque de alto perfil, incluso con más poderes de vigilancia que les otorga la legislación reciente, parece que ningún tipo de vigilancia intrusiva o guerras en el extranjero podrá frenar un problema terrorista que el mismo gobierno francés parece decidido a no hacer nada para detener. El problema no son las leyes de inmigración de Francia. Hay personas peligrosas en Francia, pero están siendo rastreadas por los organismos de seguridad franceses. El problema no es Siria. Los terroristas no han dejado de luchar allí, adquiriendo habilidades y afiliaciones mortales antes de volver a Francia, pero también han sido rastreados por los organismos de seguridad franceses. En cambio, el problema es que las agencias de seguridad francesas no están haciendo nada con estas personas peligrosas sabiendo que viven, trabajan, y al parecer conspiran en medio de la sociedad francesa. En las próximas horas y días, el gobierno francés y sus diversos co-conspiradores en su guerra indirecta contra Siria propondrán un plan de acción que dicen que contendrá la amenaza terrorista en Francia y el resto de Europa. Pero la realidad es que el problema no es algo que el gobierno francés pueda resolver, porque el problema es claramente el mismo gobierno francés. ISIS está detrás de los ataques de París, pero ¿quién está detrás de ISIS?

Con el llamado «Estado Islámico» (ISIS) emergiendo como estando detrás del ataque, la pregunta que queda es, ¿quién está detrás de ISIS? Mientras que Occidente ha tratado de mantener que la organización terrorista posee casi habilidades mitológicas, capaces de sostener las operaciones de combate contra Siria, Irak, Hezbollah del Líbano, con apoyo de Irán, y ahora a los militares rusos -al mismo tiempo llevando a cabo a gran escala, ataques terroristas de alto perfil en todo el mundo- está claro que ISIS es el destinatario de un inmenso patrocinio estatal multinacional.

El auge de ISIS se reveló ya en 2007, en las entrevistas realizadas por el periodista ganador del Premio Pulitzer Seymour Hersh en su informe de 9 páginas “The Redirection”. Las entrevistas revelaron un plan para desestabilizar y derrocar al gobierno de Siria a través del uso de extremistas sectarios -más específicamente, Al Qaeda- con armas y fondos lavados a través del aliado regional más antiguo y más firme de los Estados Unidos, Arabia Saudí.

Un informe más reciente elaborado el 2012 por el Departmento de la Agencia de Inteligencia (DIA) admitió:

Si la situación se desenreda existe la posibilidad de establecer un principado salafista declarado o no declarado en el este de Siria (Hasaka y Der Zor), y eso es exactamente lo que quieren los poderes que dan apoyo a la oposición con el fin de aislar al régimen sirio, que es considerado la profundidad estratégica de la expansión chií (Irak e Irán).

El informe de la DIA enumera con precisión cuáles son estos «poderes» de apoyo:

Occidente, los países del Golfo y Turquía apoyan a la oposición; mientras que Rusia, China e Irán apoyan al régimen.

Y hasta la fecha, sólo mirando cualquier mapa que detalle el territorio en poder de las diversas facciones del conflicto sirio, está claro que ISIS no es un «estado» de ningún tipo, sino una invasión continua que emana desde el territorio de Turquía, miembro de la OTAN, con su corredor de suministro primario cruzando la frontera turco-siria entre la ciudad siria de Ad Dana y la orilla occidental del río Éufrates, un corredor de suministro ahora cada vez más reducido.

De hecho, la desesperación exhibida por Occidente y sus esfuerzos para derrocar al gobierno sirio y salvar su fuerza irregular que está siendo diezmada por las operaciones militares conjuntas de Siria y Rusia, es directamente proporcional al tamaño cada vez más pequeño y a la estabilidad de este corredor.

Apenas la semana pasada, las fuerzas sirias restablecieron un firme control sobre el aeropuerto militar de Kweyris, que llevaba años acosado. El aeropuerto está a 20 millas del Eufrates y cuando las fuerzas sirias con el apoyo del poder aéreo de Rusia se abren camino hacia la frontera con Turquía a lo largo de la costa siria constituyen un frente unificado que esencialmente cortará el ISIS más profundo dentro de Siria para siempre.

Si las líneas de suministro del ISIS se cortan en el norte, la capacidad de combate de la organización, de otro modo inexplicable, se atrofiará. La ventana de Occidente para la oportunidad de «cambio de régimen» se está cerrando rápidamente y, tal vez en un último esfuerzo de trinchera, Francia ha recogido la sangre derramada y los cuerpos rotos de sus propios ciudadanos debajo de la ventana para evitar que se cierre para siempre.

La realidad es que Francia conocía a los atacantes de «Charlie Hebo», conocía previamente a los involucrados en el reciente ataque de París, y probablemente sabía también que esperaban su oportunidad para atacar. Con este conocimiento, se quedaron parados y no hicieron nada. Es más, parece que en vez de mantener a salvo Francia, el gobierno francés ha optado por utilizar este conocimiento como un arma en sí misma en contra de la percepción de su propio pueblo, para avanzar en su agenda geopolítica en el extranjero .

Si el pueblo de Francia quiere golpear duro a los responsables de los ataques terroristas repetidos dentro de sus fronteras, puede empezar con los que sabían de los ataques y no hicieron nada para detenerlos, que también son, casualmente, las mismas personas que ayudaron a crear ISIS y han ayudado a perpetuarlo hasta ahora.