No pudo recoger el galardón en persona y fue su familia quien subió al escenario
La activista ruandesa Victoire Ingabire ha recibido el Premio Internacional de Derechos Humanos 2019. Galardón que le otorgan en reconocimiento a su lucha por los derechos humanos, el diálogo y la construcción de la paz. Un trabajo que hizo en buena parte desde Mallorca, durante su exilio, con el apoyo de diferentes ONG.
No pudo recoger el galardón en persona. Quien subió al escenario fue su familia. Pero sí llevarse este sentido aplauso. Un hecho, recibir este reconocimiento a través de una pantalla, que dice demuestra que a pesar de haber sido liberada hace dos años, sigue prisionera en su país.
Una lucha que le ha hecho pasar 16 años en el exilio y 7 en la cárcel acusada de traición y de negar el genocidio de los años 90.
La ofensiva democrática contra el régimen de Paul Kagame la preparó en Mallorca, con el apoyo de diferentes ONG, como la Fundación S’Olivar de Joan Carrero. Participó de forma muy activa en el proceso de diálogo interuandès que se impulsó en 2004 desde las Islas.
Ahora ha creado un nuevo partido. El Partido para el Desarrollo y la Libertad para Todos, desde donde continuará, dice, exigiendo una democracia real y dando voz a quien no la tiene.
Fuente: IB3 notícies