Rencontres pour la Paix
Comisión de África Central

Al Sr. Josep BORRELL,
vicepresidente de la Comisión Europea y alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad

Hecho en Bruselas, el 17.02.2021

Copia a:
– D. David SASSOLI, presidente del Parlamento Europeo
– D. Thérence NTAHIRAJA, embajador de la República de Burundi

Asunto: Contribución de nuestro grupo de trabajo sobre Burundi al debate sobre la evolución de la situación en este país desde 2015 y su impacto en la cooperación UE-Burundi

Señor presidente y alto representante,

Nuestra Comisión de África Central de los Encuentros por la Paz reúne a responsables de asociaciones de voluntariado y ONG de desarrollo, tanto belgas como de la diáspora africana, que siguen la evolución de las relaciones entre Europa y los países del África de los Grandes Lagos, todavía en crisis.

Estamos convencidos de que la Unión Europea (UE) sigue teniendo un papel importante y privilegiado en esta región, no sólo en la cooperación al desarrollo, sino también en las cuestiones políticas que afectan a la paz y la seguridad de las poblaciones.

Las sucesivas catástrofes humanitarias en África Central no han dejado de preocuparnos y han dado lugar a numerosos debates, incluso en el seno del Parlamento Europeo.

La situación de uno de los países de esta delicada región ha sido especialmente señalada: la de Burundi, un pequeño país amigo y asociado a nuestro continente desde los inicios de la construcción europea y la creación del primer Fondo Europeo de Desarrollo (FED).

Sin salida al mar y enfrentado a una gran precariedad, este país está sometido a la presión y, desde 2016, a las sanciones de la UE, basadas en la información que emana, entre otros, de los círculos radicales de la oposición, la que está dispuesta a derrocar al gobierno desde las elecciones de 2015, cuya legitimidad ha cuestionado.

Creemos que la aplicación de las sanciones, que han llevado a la suspensión de toda ayuda directa, se ha hecho sin haber agotado previamente todas las vías de diálogo, de un verdadero diálogo basado en una información más amplia y menos unilateral, así como en una mejor comprensión de las profundas aspiraciones de una población burundesa preocupada sobre todo por ver reforzada la paz en las colinas y por preservar el éxito del largo proceso de reconciliación nacional, a pesar de un contexto regional hostil y desestabilizador.

Por ello, acogemos con satisfacción vuestras iniciativas que favorecen la reanudación de los intercambios entre la UE y las autoridades burundesas, con el fin de normalizar las relaciones y levantar rápidamente las sanciones que han afectado más a la población que a los dirigentes en principio señalados.

Es cierto que la «carta abierta» que Marie ARENA y otros 42 eurodiputados acaban de enviarle sigue siendo muy crítica con las autoridades burundesas e incluso pone en entredicho las innegables mejoras que han realizado en materia de buen gobierno, respeto de los derechos humanos y libertades fundamentales.

En nombre de los más respetables ideales humanistas, esta «carta abierta» nos parece que quiere ante todo imponer nuevas condiciones previas al diálogo constructivo iniciado en Gitega entre el ministro de Asuntos Exteriores de Burundi y el delegado de la Comisión Europea acreditado allí. Esto pondría en duda un próximo levantamiento de las sanciones que entraron en vigor el 14 de marzo de 2016 y que se prorrogaron gracias a una insistencia inusual y sin muchos matices de las resoluciones del Parlamento Europeo de julio de 2018 y enero de 2020.

Para Marie ARENA y consortes, las condiciones previas ineludibles son esencialmente:

– La retirada de las órdenes de detención internacional relativas a una serie de presuntos dirigentes de la campaña insurreccional y del intento de golpe de Estado de 2015, en el marco de la ilegalidad de la candidatura del presidente Pierre NKURUNZIZA en las elecciones.

– El regreso seguro de los refugiados burundeses que se exiliaron durante la campaña de insurgencia y que aún temen ser afectados por su supuesta simpatía con los círculos golpistas.

– La adopción de sanciones contra los jóvenes del CNDD-FDD, para evitar que abusen de la seguridad y el orden público.

Creemos que es arriesgado para la buena cooperación entre la UE y sus Estados miembros seguir limitando sus fuentes de información a las quejas y demandas de una oposición que está lejos de ser una alternativa creíble.

En un contexto relativamente controvertido, nos parece oportuno escuchar las posiciones del Gobierno de Burundi, que se ha esforzado a lo largo de las tres últimas décadas por aplicar, con algunas dificultades, los logros esenciales del acuerdo de paz de Arusha, adoptado por todos los actores políticos en 2000 bajo la decisiva mediación de Nelson MANDELA.

Para que quede constancia, nos gustaría recordar algunos puntos significativos planteados por los representantes y portavoces de Burundi:

1. En cuanto a la acusación de ilegalidad de la candidatura del presidente Pierre NKURUNZIZA en 2015: esto sirvió de leitmotiv para la campaña insurreccional destinada a impedir el desarrollo pacífico del proceso electoral creando un caos generalizado que condujo al intento de golpe de Estado dirigido por el general Godefroid NIYOMBARE el 13 de mayo de 2015.

Esta violentísima campaña, que se concentró en la antigua capital Bujumbura, provocó la muerte de muchos burundeses, así como la salida al exilio de un flujo masivo de refugiados hacia los países vecinos, especialmente Ruanda y la RDC, así como importantes daños en las infraestructuras públicas, cuyo coste se estimó en más de 25 millones de euros.

Bajo la presión de algunos opositores, la controvertida candidatura se sometió al examen inmediato del Tribunal Constitucional y, posteriormente, del Tribunal de Justicia de la Comunidad de África Oriental (CAO). Ambos tribunales se mostraron de acuerdo con la interpretación oficial, a saber, que Pierre NKURUNZIZA sólo había presentado su candidatura a las elecciones presidenciales, como prescribe la Constitución por sufragio universal directo y secreto, en 2010 y en 2015. Y ello por la razón obvia de que en 2005, todavía en periodo de crisis, no hubo elección por voto popular directo, sino un simple nombramiento por votación de los parlamentarios.

2. En cuanto a los excesos autoritarios del presidente de la República, constatamos que el difunto Pierre Nkurunziza realizó numerosos gestos de apertura y apaciguamiento; en primer lugar, cumplió su promesa de no presentarse como candidato a las elecciones de mayo de 2020 y garantizó la celebración de un diálogo interburundés para promover intercambios constructivos entre el gobierno y los partidos políticos reconocidos por la ley.

Este diálogo allanó el camino para la preparación conjunta del referéndum constitucional del 17 de mayo de 2018, así como el código electoral y una hoja de ruta consensuada que llevara a las elecciones de 2020 en buenas condiciones.

Además, en 2017 se reconocieron nuevos partidos: el «Congreso Nacional por la Libertad» (CNL) de Agathon RWASA y el » Movimiento de Patriotas Humanistas » (MPH) de Casimir NICAYENZI, con lo que el número total de partidos registrados ascendió a 34, libres de organizarse y reunirse en cada nivel administrativo, como testigos del pluralismo de la vida política en Burundi.

Por último, muchos refugiados víctimas de las secuelas de la insurgencia y el intento de golpe de Estado de 2015, y que no estuvieron en absoluto implicados en esta regresión asesina, pudieron regresar libremente a Burundi y participar en las elecciones de 2020 y en los programas de desarrollo socioeconómico emprendidos en todas partes, siguiendo el ejemplo de Anicet NIYONKURU, ex secretario general del CENARED, una coalición de partidos de la oposición democrática. Incluso fue llamado a ocupar un puesto de influencia en el ejecutivo.

Uno de los avances que hay que destacar en la nueva constitución: permite incorporar tres diputados y tres senadores twa, para mejorar la protección de una etnia ultraminoritaria a menudo dejada de lado.

Este recurso de protección se complementa con el nombramiento de una mujer twa al frente del Ministerio de Solidaridad Nacional, Asuntos Sociales y Derechos Humanos y Género.

3. Libertad de expresión: ¿un salto adelante?

A principios de febrero de 2021, se produjo una apertura total en el ámbito muy desarrollado de los medios de comunicación en Burundi.

Ya había 20 emisoras de radio locales públicas e independientes, 4 radios comunitarias y 7 emisoras de radio y televisión que emitían sin obstáculos en Burundi, mientras que seguían apareciendo 24 periódicos públicos e independientes.

Sólo dos emisoras de radio, RPA o Radio Publique Africaine y Radio-Télévision «Renaissance» permanecieron suspendidas, en relación sobre todo a su cercanía a los círculos golpistas de mayo de 2015.

Afortunadamente, bajo el impulso del nuevo presidente de la República, Évariste NDAYISHIMIYE, hombre dialogante, se iniciaron las negociaciones con los mencionados órganos suspendidos y permitieron eliminar los últimos obstáculos.

4. La libertad de asociación aumenta…

Burundi ha realizado importantes progresos en este ámbito, a juzgar por el hecho de que más de 8.000 ASBL y congregaciones religiosas, así como más de 3.000 cooperativas, funcionan con total libertad, lo que demuestra el desarrollo de una sociedad civil dinámica y autónoma, garantía de apertura democrática.

El problema de que las ONG occidentales se vean obligadas a abrir su personal local a todos los componentes de la sociedad burundesa ha exigido ciertamente un poco de flexibilidad, pero apenas ha sido un obstáculo para el desarrollo de sus actividades específicas.

5. La justicia y sus requisitos…

Burundi, bajo el liderazgo del CNDD-FDD, se mantiene firme en el marco de los principios fundamentales contenidos en el Acuerdo de Paz de Arusha de 2000, ya que marcan el punto de inflexión decisivo que cierra la era de los regímenes de exclusión étnica y subregional y el recurso a los sucesivos golpes de fuerza que han ensangrentado la historia burundesa.

Una vez restablecida la calma en Bujumbura y reforzada la seguridad interna en 2015, el Tribunal Supremo abrió investigaciones contra los autores de la violencia asesina y del intento de derrocar la legitimidad popular. Esto condujo a la emisión de 34 órdenes de detención internacionales. El Tribunal Supremo concluyó finalmente el 23 de junio de 2020 con penas de cadena perpetua con fuertes sanciones económicas.

Los principales condenados encontraron refugio en Ruanda, bajo la protección del régimen del FPR. Así, los jóvenes refugiados burundeses acogidos en el campamento de Mahama pudieron recibir formación militar para llevar a cabo ataques e infiltraciones, incluyendo incursiones armadas en las provincias de Cibitoke y Kayanza en 2019. Cabe señalar de paso que los 4 periodistas de IWACU que investigaban estas repetidas incursiones fueron liberados en enero de 2021.

Pero todo esto no ha convertido a Burundi en un Estado represivo. Así, durante los últimos cuatro años del quinquenio de Pierre NKURUNZIZA, se han concedido casi 8.500 indultos presidenciales.

Además, Burundi ha adoptado una legislación para castigar los delitos de genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra, con la creación de un Observatorio Nacional para la prevención y erradicación de este grave tipo de delitos. También ha adoptado una legislación especial para prevenir y castigar la violencia de género.

6. ¿Son violentos los jóvenes «Imbonerakure»?

Los jóvenes del CNDD-FDD se llaman a sí mismos «Imbonerakure» en kirundi, en referencia a los vigías que, en los días de la resistencia, se encargaban de ver los peligros de los ataques desde lejos.

Desde el inicio de la insurgencia en 2015, estos jóvenes fueron golpeados duramente por una campaña de diabolización destinada a equipararlos con una milicia violenta. A este respecto, los funcionarios del gobierno recordaron que todos los partidos reconocidos tienen movimientos para orientar a los jóvenes y prepararlos para asumir responsabilidades en la vida política y social a todos los niveles. Por ello, se pide a todos los dirigentes de los partidos que estén atentos y eviten el más mínimo riesgo de infiltración de provocadores y matones que siembren la división y el caos a su alrededor.

Creemos que en lugar de denunciar ciertos excesos reales en las zonas convulsas, la cooperación europea debería dar prioridad a ayudar a las autoridades locales a integrar mejor a los jóvenes de las zonas rurales que han perdido su orientación sólida.

7. En conclusión…

Lejos de nosotros discutir el papel del Parlamento Europeo en la evaluación de nuestra cooperación con los países ACP con estructuras frágiles. No obstante, estamos convencidos de la urgencia de proseguir la reactivación del diálogo iniciado con un socio burundés que considera que las sanciones son profundamente discriminatorias para un país que está en pleno proceso de cambio y cuya integración en el corazón de la región de los Grandes Lagos sigue siendo muy problemática para su comercio y su seguridad.

En efecto, desde hace un cuarto de siglo, la región del África de los Grandes Lagos está sumida en una inseguridad que propicia la violencia, los desplazamientos brutales de población, el acaparamiento de tierras, las incursiones extranjeras y la explotación depredadora de los recursos naturales, principalmente en la RDC, en violación del derecho internacional y de la Carta de la ONU.

A pesar de sus desmentidos, el ejército ruandés sigue ocupando zonas clave de las dos provincias del Kivu, saqueando sistemáticamente las riquezas locales con la ayuda de sus milicias aliadas.

En el futuro, la UE debe dar prioridad a las políticas de seguridad en toda la región de los Grandes Lagos, para contribuir a poner fin definitivamente a la crisis y restablecer una paz regional duradera.

En este contexto, Burundi puede ser uno de los actores de esta política de restablecimiento de la paz. Sus autoridades exigen estabilidad política y seguridad, que son condiciones para su desarrollo.

Con el levantamiento de las sanciones, Burundi debe, en primer lugar, recuperar los fondos ya asignados del 11º Fondo Europeo de Desarrollo y, a continuación, movilizar el 12º Fondo Europeo de Desarrollo para la aplicación del Plan Nacional de Desarrollo (PND) de Burundi. Lo que está en juego es la prosperidad del pueblo burundés y la aplicación concreta de la asociación económica beneficiosa para todos que la UE pretende concluir con sus socios africanos.

Quedamos a su entera disposición para discutir cualquiera de los temas de nuestra contribución.

Le ruego acepte, señor presidente y alto representante, el testimonio de mi más alta consideración.

Para el grupo de trabajo de Burundi de la Comisión Centroafricana de las Reuniones de Paz.

[Firmado]

Alain DE BROUWER
Jefe de División Honorario del Parlamento Europeo/Grupo del PPE
Ex coordinador de la Comisión de África Central de los Encuentros de Paz

Avenue de Bouchout 7,
B-1780 Wemmel
Teléfono: 02/269.64.35

Coordinación general: commission.afrique@gmx.fr

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