El trailer de El Diluvio (el extraordinario documental de Keith cuyo nacimiento fue abortado) visto hoy, a la luz de las recientes revelaciones sobre los crímenes de la USAID, la gran Agencia “no gubernamental” estadounidense, financiadora (junto al Pentágono y el Departamento de Estado) de las más “nobles” causas

Descanse en la Paz nuestro amigo Keith. Pocos como él han luchado con tanto coraje y energía durante los últimos años en favor de La Verdad. Pocos como él han dejado en evidencia que (como últimamente insisto en todos mis artículos y libros) nuestro mundo anglo/occidental, es El Imperio de la Mentira. Por eso me parece muy oportuno que en el trailer de su documental la primera persona que aparece sea Noam Chomsky desenmascarando el deleznable papel de “nuestros” complacientes intelectuales en el interior mismo de Occidente.

Algunos amigos no ceden desde hace años en su tesis de que la Mentira reina por todas partes igualmente. No es esa mi experiencia de décadas. La falsedades y maquinaciones del Imperio de la Mentira las he sufrido en mi propia carne. Por el contrario, desde que hace unos años contactó conmigo Victor Ternovsky y publicó en Sputnik Mundo algunas de las entrevistas que me realizó, sigo de cerca a esta gran agencia y página web del Gobierno ruso sin haber podido encontrar en ella ninguna mentira consciente e intencionadamente promovida. Por el contrario, cuando intento escuchar las noticias o los análisis geopolíticos en cualquiera de “nuestros” grandes medios, la cosa se vuelve tan insoportable, con frecuencia hasta vomitiva, que mi escucha no puede durar más que unos pocos minutos.

A lo sumo, en Sputnik Mundo he encontrado errores. Algunos de bulto, como el error de haber caído en la versión oficial, la políticamente correcta, referente al genocidio ruandés. Dicho sea de paso, tras “la invasión no provocada” de Rusia a Ucrania, Sputnik fue eliminada de Internet en toda la autodenominada “Comunidad Internacional”. Otras de las citadas entrevistas fueron eliminadas definitivamente por las “graciosas majestades” de esa Comunidad Internacional, que, en nuestro mundo libre e informado, deciden lo que es verdadero o falso. Así que es imposible acceder a ellas.

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Sí, Verdad con mayúscula. Así lo escribo en el título de este artículo. Porque, en primer lugar, el de Verdad es uno de los nombres de Dios. Para mahatma Gandhi, incluso es el nombre más adecuado para referirnos a Él. Por su parte, Jesús, frente a Pilato en el momento más decisivo de su vida, afirmó: “Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo: para dar testimonio de la Verdad” (Juan 18, 37). ¿Qué otra tarea puede haber en esta vida más noble que la de buscar La Verdad y ser testigos de ella? ¿Somos conscientes de la enorme y maligna trascendencia de La Mentira (El padre de la mentira es Satanás, Juan 8, 44-46)?

En segundo lugar, la Verdad siempre es liberadora (“La Verdad os hará libres”, Juan 8, 32). Más aún, sin La Verdad no hay ninguna libertad posible. Ni mucho menos democracia. ¡Qué perversa ridiculez es que el Imperio de la Mentira presuma de democracia y que, además, se atreva a afirmar que la va a exportar gracias a su poderío militar! ¡Qué estupidez de nuestra parte tragarnos un día tras otro semejante bazofia totalitaria! ¿Valoraciones excesivamente duras? El gran teólogo Dietrich Bonhoeffer (que se enfrentó frontalmente al totalitarismo nazi y que pagó por ello con su vida, siendo ahorcado en el campo de concentración de Flossenbürg) no lo creía así cuando reflexionó sobre la estupidez.

Y en tercer lugar, finalmente hemos de concluir que, como La Libertad es algo extraordinario (tan extraordinario que Dios nos hizo libres incluso sabiendo que por La Libertad entraría El Mal en el mundo)… ¡La Verdad es, por tanto, la Fuente y Origen de todo lo demás! En sánscrito el término satya (verdad) deriva de sat (ser). Lo cual significa que sin el Ser/Verdad nada existe. Ciertamente “Dios es Amor” (1ª Carta de Juan 4, 8). Pero el amor es un acto libre, no puede haber amor sin libertad. Los robots no aman, solo obedecen. Y, como acabo de afirmar, no hay Libertad alguna sin Verdad.

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Sí, El Diluvio es un extraordinario documental abortado. Es lo que afirmo en el subtítulo. Fue abortado de modo parecido al que fueron boicoteados sistemáticamente otros documentales extraordinarios. Sí, los califico de extraordinarios. Es verdaderamente extraordinario el poder sacar a la luz las mayores masacres habidas tras la Segunda Guerra Mundial. Es verdaderamente extraordinario el traerlas a la luz en un mundo indigno en el que son sistemáticamente ocultadas. Son documentales boicoteados sistemáticamente mientras se financia escandalosamente La Mentira, también sistemática, publicada sin escrúpulo alguno por tantos “reconocidos expertos” y “respetables” grandes medios corporativos.

El extraordinario documental de Keith no pudo finalmente ver la luz. Keith fue traicionado y le fue robada la documentación. La rocambolesca traición y robo de su documental ¿podría tratarse tan solo de eventos aleatorios interpersonales originados únicamente por el afán indecente de un beneficio económico? Es difícil creerlo así cuando los alineamos junto a otros muchos boicots a la difusión de documentales, e incluso de documentos oficiales de la misma ONU, que tratan sobre el dossier Ruanda/Congo. Boicots realizados, con métodos realmente mafiosos, por parte del genocida Paul Kagame y sus poderosos padrinos anglo/occidentales. También es verdad que Keith no tuvo suficientes apoyos económicos. Como es también el caso del documental español Prisión Ruanda. Otro extraordinario documental que parece no interesar a pesar de que, seguramente, el mayor campo de concentración actual al aire libre no es Gaza sino Ruanda. De ahí el título.

Nuestros conciudadanos están totalmente absorbidos por sus afanes cotidianos. Y aun cuando en algún momento llegan a dar un paso un poco más generoso, prefieren escuchar y apadrinar a organizaciones de “reconocido prestigio”. Sobre todo si son asistencialistas o de cooperación y “no se meten en política”. Precisamente en estos días muchas organizaciones están apareciendo en el listado de las financiadas por la USAID (Ayuda USA al Desarrollo), la criminal gran Agencia “independiente” de Estados Unidos, que de no Gubernamental tan solo tiene el nombre. Sin hablar de las otras grandes ONGs de Derechos Humanos, como HRW o Amnistía Internacional, tan estrechamente ligadas a los poderes gubernamentales y, sobre todo, a las elites “filantrópicas”.

¿Y si la verdad/información no fuese tan importante como es en realidad… por qué la USAID se habría dedicado sobre todo a financiar a mentirosos/canallas en los más importantes medios de multitud de países (minuto 50) y a derrocar gobiernos mediante revoluciones en las que la propaganda es la clave principal? Entre tales revoluciones hay que incluir las más recientes, como las llevadas a cabo en Siria desde 2011 y en Ucrania en 2014.

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Cada uno de estos dossiers merecería un artículo en exclusiva. Igualmente lo merecería el dossier de la financiación por la USAID de los laboratorios biológicos descubiertos en Ucrania. Y muy especialmente el de la financiación, con 53.000.000 de dólares, de los experimentos de ganancia de función del coronavirus realizados en Wuhan y la posterior “fuga” del virus en esta ciudad clave para China, el gran país que pone en peligro la hegemonía unipolar anglo/occidental. Como un periodista alemán confiesa en el primero de estos videos, ahora les pagan para que estén centrados en la mentira de que es necesario recortar el “despilfarro” de “gasto” social a fin de aumentar el presupuesto militar… ¡porque “el Putin” nos va a atacar!

Idioteces para unas sociedades idiotizadas por la propaganda masiva del Imperio de la Mentira. Idioteces para unas sociedades idiotizadas que votan a políticos igualmente idiotas o, lo que es peor, canallas. Aquellos que nos hemos mantenido fieles a la Verdad no sé cuánto tiempo aún tendremos que soportar la marginación e incluso el desprecio (parece que muchas falsedades empiezan a salir a la luz), mientras estas sociedades siguen escuchando a los “expertos” y medios que ostentan “el supuesto saber”.

Ya en el año 1999 tuve que empezar a soportar (es solo un ejemplo ya lejano en el tiempo) incluso campañas mediáticas de “denuncia” por parte de algunas ONGs que no han llegado a entender nunca todas estas claves globales profundas (o que han preferido no entender tales claves a fin de no complicarse la vida). Campañas mediáticas de “denuncia” del daño que “Carrero” hacía al criticar a las grandes ONGs. Pero sin duda alguna… ¡habrá valido la pena dar la mano a nuestros hermanos víctimas de este Imperio de la Mentira y acompañarlos a lo largo de toda nuestra vida!

Foto: Visado de un mes de Keith Harmon Snow para el Sudán del Sur de 18 de enero de 2004.

Juan Antonio Aguilar: USAID... La marca de la bestia (DMP Geopolítica, 08.02.2025)